Viajar a Turquía, un país de paisajes exóticos que posee diversos palacios, mezquitas y castillos. Su capital es Ankara y su ciudad más poblada Estambul.
Gracias a su posición estratégica, ubicada a mitad de camino entre Europa y Asia, Turquía supo ser hogar de grandes civilizaciones y lugar donde se libraron grandes batallas.
Antes de viajar a Turquía, para más información consulta la web del Ministerio de Asuntos Exteriores
Los ciudadanos españoles pueden entrar o salir de Turquía con pasaporte o DNI indistintamente, con una validez mínima de seis meses a partir de la fecha de entrada en Turquía, y un visado, que se puede tramitar en la web del Ministerio de Asuntos Exteriores de Turquía en sólo tres pasos: introduces los datos de tu D.N.I o pasaporte, realizas el pago con una tarjeta de crédito o débito e imprimes el visado que recibirás por correo electrónico.
El clima en Turquía es muy similar al de los países del Mediterráneo europeo. De junio a septiembre es verano, hace mucho calor y es la temporada alta, sobre todo en la costa del Mediterráneo. De diciembre a marzo es invierno y temporada baja, suele nevar en algunas zonas de Turquía, como Capadocia. En las temporadas intermedias, los precios son más bajos, el clima es más agradable, hay menos gente y se disfruta más.
En Turquía la religión musulmana es mucho más flexible y tolerante que en otros países islámicos del mundo. Estambul es un buen ejemplo de ello, ya que la mayoría de sus mezquitas se pueden visitar. La entrada es gratuita y si se quiere se puede dejar un donativo a la salida para sufragar su mantenimiento.
La moneda oficial de Turquía es la lira turca. Lo aconsejable es cambiar algo de dinero en el propio aeropuerto, ya que suelen ofrecer cambios competitivos.
Las tarjetas de crédito internacionales más habituales (Visa, MasterCard y American Express) se aceptan en los hoteles, restaurantes y en la mayoría de las tiendas. En muchos lugares verás que podrás pagar en euros, pero siempre te saldrá mejor hacerlo en moneda local.
El idioma oficial de Turquía es el turco, una lengua que pertenece a la misma rama que el finlandés y el húngaro y que se escribe con caracteres latinos, aunque también se hablan kurdo, armenio, griego y árabe en algunas regiones del país. Sin embargo, en inglés os entenderéis perfectamente en todas partes, y en muchos lugares también en castellano.
La entrada a las mezquitas es libre, pero al ser un sitio de rezo y concentración, el silencio es obligatorio. Todos los visitantes deben usar camisas de mangas largas, pantalones o faldas que cubran las piernas. Las mujeres deben cubrirse la cabeza y los hombros con un pañuelo, y hay que quitarse los zapatos antes de entrar en la mezquita.
Como manda la tradición islámica, en las mezquitas hay que entrar descalzos. Podemos dejar los zapatos a la entrada o meterlos en una bolsa y llevarlos con nosotros. Aunque en la entrada nos facilitan todo lo necesario para adecuar nuestra vestimenta, lo más práctico es llevar siempre un pañuelo en la mochila para cubrir el cabello, en el caso de las mujeres. El resto es simplemente una cuestión de sentido común y respeto. Actúa como si estuvieras en cualquier otro templo, no hagas fotos donde no esté permitido, no te tumbes en el suelo, trata de pasar desapercibido y haz tu visita en silencio.